Como un pez de colores que los pescadores sacaron a la orilla con una red. Cómo sabía lo que habían deseado, que se convirtiera en rubia. Sin embargo, también tuvo que hacer realidad su segundo deseo: dejarles entrar en todas sus rendijas. Creo que también conseguirá su tercer deseo: ¡chupar un coche! Así que ahora tiene que quedarse en tierra firme un poco más que con el abuelo del cuento. ¡Porque parece que a ella también le gusta chupar y tragar!
¡No está mal, después del trabajo se encuentra con ella en una lencería tan sexy! ¡Ver todo el día y sólo pensó en la rapidez de conseguir en su polla! Honestamente - no envidio al hombre, muy pronto se dará cuenta de que no tiene sentido esperar tanto tiempo hasta la noche. ¡Marido en el trabajo, la casa está vacía ... es muy posible tener un amante que viene!
Pobre negro.